A raíz del aumento de los conflictos violentos a partir de 2010, se han registrado niveles históricamente altos de desplazamiento forzado. A nivel mundial, según datos de 2017, hay alrededor de 68 millones de refugiados, personas desplazadas internamente y personas en busca de asilo, que han dejado sus hogares para huir de la violencia, el conflicto y la persecución. (PDF)
La fragilidad, el conflicto y la violencia amenazan con revertir los avances en el desarrollo. Se prevé que, para 2030, la proporción de las personas extremadamente pobres que vivirán en situaciones afectadas por un conflicto superará el 50 %. Con frecuencia, estas situaciones dan lugar al desplazamiento de las poblaciones, lo que afecta tanto a las personas que deben trasladarse como a las comunidades que les dan albergue.
Las penurias que padecieron estas personas debido a su desplazamiento aumentaron su vulnerabilidad. Muchas de ellas sufren traumas, y las mujeres y las niñas corren alto riesgo de padecer violencia de género. Necesitan ayuda para recuperar su capacidad de obrar con independencia y comenzar a reconstruir su vida.
La Asociación Internacional de Fomento (AIF) respalda a los países frágiles y afectados por conflictos, aportando los fondos y conocimientos necesarios para reconstruir instituciones y economías resilientes, reducir los riesgos de fragilidad y conflicto, y establecer las estructuras que los habitantes necesitan para retomar una vida pacífica y productiva. La AIF sigue trabajando en los países durante un conflicto activo y también durante la recuperación y transición.
Salir de la fragilidad es posible, pero requiere la creación de instituciones que funcionen bien. El modelo de la AIF, flexible, previsible y orientado hacia los países, es particularmente eficaz. La AIF es una pieza esencial en la ecuación del desarrollo en general, pues actúa como plataforma para la coordinación de los donantes (incluida la implementación de fondos fiduciarios de múltiples donantes) y promueve la transparencia y la rendición de cuentas tanto de aquellos como de los Estados.
A pesar de los abrumadores desafíos, el apoyo que brinda la AIF está ayudando a los países a pasar de la etapa de crisis y fragilidad al desarrollo. En Afganistán, por ejemplo, contribuyó a crear 66 millones de días de empleo para trabajadores calificados y no calificados, y ayudó a establecer, en todo el país, 45 751 consejos de desarrollo comunitario cuyos miembros se eligen democráticamente mediante voto secreto.
Los ejemplos que se resumen en las siguientes páginas ilustran la manera en que las operaciones financiadas por la AIF en Estados frágiles y afectados por conflictos1 están dando buen resultado. No deje de consultar los otros ABC de la AIF (logros, por país), en los que se pone de relieve su labor en materia de cambio climático, género, empleo y transformación económica, y gobernanza y fortalecimiento institucional.
1Los países incluidos en este folleto reúnen actualmente las condiciones para recibir apoyo de la AIF. Consulte información adicional sobre los países prestarios.